Descripción
Su fundadora fue la Sra. Dolores Contreras Vda. de Andrade quien nació el día 9 de mayo de 1898 en la ciudad de Puebla. Contrae matrimonio con el Sr. Alberto Eugenio Andrade, una persona honesta, noble y emprendedora, quien decide dedicarse a la producción y venta de derivados lácteos, y forma una empresa denominada “Cremería Americana, S.A. de C.V.
En el año de 1952 fallece el Sr. Andrade, y su esposa se queda al frente al frente del negocio. La Sra. Dolores Contreras Vda. de Andrade se distinguió siempre por su bondad y ayuda a los demás.
La Sra. Dolores Contreras Vda. de Andrade, a morir el 15 de septiembre de 1976, dispone en su testamento la constitución de la Fundación de Asistencia Privada “Alberto y Dolores Andrade” (ADA) la cual es administrada por el Patronato como órgano supremo, y un cuerpo de funcionarios y empleados.
El principal objetivo de la Fundación ADA es apoyar a estudiantes de excelencia académica acompañándolos a lo largo de todo su trayecto de estudios hasta que logren conseguir un título profesional, con el cual obtendrán mayores oportunidades para competir en el campo laboral y así construirse un futuro mejor.
Los recursos de la Fundación ADA provienen de la empresa CREMERÍA AMERICANA S.A. por lo que al comprar y consumir sus productos en algo estamos contribuyendo a la educación de miles de jóvenes para que terminen una carrera profesional. La información completa se encuentra en su página web.
El 5 de enero de 1905 en la calle de Jiménez en el Centro de la Ciudad de México, se estableció un pequeño negocio de fabricación y venta de mantequilla llamado “Andrade y Zaragoza”, apellidos de dos visionarios. El primero buscaba dar a México mantequillas alta calidad, y el segundo que confió en el primero.
Con este propósito, Don Alberto Andrade elaboró sus productos con una técnica avanzada para su época de pasteurización contra los procesos rudimentarios de descremado de leche y batido de la crema de esa época. Convirtiéndose la primera en implementar el proceso de esterilización a las mantequillas en el país, haciendo realidad el lema: “la más antigua y la más moderna”. Don Andrade convence a su socio Zaragoza de establecerse en las afueras de la Ciudad, al tranquillo barrio de Tacubaya, donde tendrían mejores oportunidades de crecimiento.
A los pocos años, Don Alberto saca al mercado la Mantequilla Gloria, la cual, se convirtió, desde sus inicios hasta nuestros días, en un producto consentido de las amas de casa, panaderos, restauranteros y reposteros, por su sabor y calidad.
Para 1930, la compañía se expandió al establecer centros de distribución en Guadalajara y Monterrey. En 1932 el Sr. Andrade contrae matrimonio con la Sra. Dolores Contreras, quién le ayudó mucho en la formación de esta empresa. En los años 40’s, Don Alberto se queda como accionista único de la compañía y decide cambiarle el nombre a “Cremería Americana, S.A.”, en reconocimiento al sistema de trabajo “a la americana”… arduo y tenaz.
Don Alberto muere en 1952 y su esposa toma la administración de la empresa y a mediados de los años 60’s, Doña Dolores decide institucionalizar la empresa a través de la formación de un Consejo de Administración, el cual llevó a Cremería Americana a un desarrollo y crecimiento que se sostiene hasta nuestros días.
Enlace Recomendado: