Descripción
Es un diminuto colibrí endémico de México. Se distribuye en una pequeña área de 25 km en la Sierra de Atoyac de Álvarez municipio localizado en el estado de Guerrero en México. Vive en bosques de encino, pino-encino y bosques nublados (9001,800 msnm) donde tiene a su disposición un gran festín de néctar e insectos. Esta ave llega a medir solo unos 7-7.5 cm, Colibrí pequeño, tiene el pico negro corto y recto. El macho tiene una cresta filamentosa corta (de 1 a 2 cm) de color canela, se caracteriza por tener una garganta muy llamativa al ser de color verde brillante. Los machos tienen una mancha violeta-azul corriendo hacia atrás y abajo del ojo (cuyas plumas se levantan cuando están muy excitados) y un parche brillante sobre su garganta. Las plumas de las hembras son parecidas a la de los machos, los parches del oído y de la garganta son más pequeños.
Las especies de colibrí endémicas se confinan a nichos de hábitat que son particularmente vulnerables a los peligros ambientales. La coqueta de Atoyac tiene el tamaño de un pulgar y la cresta corta, y se encuentra en los límites del bosque a lo largo de un tramo de camino de 24 kilómetros en el Municipio de Atoyac de Álvarez, ubicado en la Sierra Madre del Sur, en el sur de México. Ahora una zona de guerra de los carteles de droga, campesinos guerrilleros y milicias gubernamentales; el área es demasiado peligrosa para investigaciones biológicas y, como resultado, se conoce muy poco del estado del ave. Birdlife International, una organización conservacionista sin ánimo de lucro, estima que la coqueta cresta corta probablemente esté desapareciendo en un 10 a 20 por ciento cada década debido a que su hábitat forestal se reemplaza con plantaciones de café y otras cosechas, entre ellas las amapolas de opio. También existe otra amenaza: el cambio climático. Con el aumento de las temperaturas globales, los períodos de florecimiento de las salvias y otras importantes plantas de néctar de las que dependen los colibríes están cambiando más temprano en la temporada, con lo cual se desfasan las demandas de búsqueda de comida por parte de las aves. Además los efectos de la caza furtiva indiscriminada por cazadores furtivos («sin discriminación; hembras, ejemplares jóvenes, lo que encuentren») en poblaciones de especies endémicas que están confinadas a pequeñas áreas está marcando un importante declive en la población de esta especie. Actualmente esta especie se encuentra está clasificada en peligro crítico, es decir, pertenece a la última categoría de la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) antes de que un animal se extinga.
Se encuentra solo en el sur de México, en un área muy reducida de unos 25 km de ancho que se extiende desde la carretera Atoyac-Paraíso-Puerto Gallo en la Sierra Madre del Sur en el municipio de Atoyac de Álvarez, Guerrero Su hábitat son bosques de encino, pino-encino y bosques nublados, cafetales con altura de 900 a 1.400 m s. n. m, los bosques de roble, pino y bosques con abundante humedad y variedad de flores conforman el hábitat ideal de esta especie. Antes de que se asignara un estatus especifico a la raza brachylopha, se la consideraba como “aparentemente muy rara en México” (Blake 1953) La hembra que fue vista en abril de 1988 fue observada durante aproximadamente 20 segundos luego de cinco días de búsqueda y las experiencias de otros observadores de aves, en 1988 y 1989, parecieron confirmar que esta especie (como todas las demás especies de Lophornis) era rara y difícil de encontrar. Sin embargo, observaciones de aves, que tuvieron lugar durante 1990, sugieren que la especie es en realidad endémica del lugar: cuatro aves fueron ncontradas en enero, 8-12 km al norte de Nueva Delhi; tres (un macho y dos hembras) el23 de marzo, 2-3 km al sur de Nueva Delhi; cuatro el 21 de mayo, 3,5 km al norte de San Vicente de Benítez; y siete el 23 de mayo, entre Paraíso y San Vicente de Benítez (ascendiendo a un total de 9-10 aves, en el trecho de vía) (S.N.G. Howell in litt. 1991, Howell 1992) Se estima que su población actualmente es de entre 250 y 900 individuos maduros, pero el número año a año va decreciendo.
