Descripción
Nació en la Ciudad de México, el 31 de agosto de 1910 murió el 30 de enero de 2009
ATLETA EJEMPLAR
Durante su vida, Chayito se mantuvo de la venta de periódicos y revistas en un puesto de la colonia Nápoles. Tuvo 2 hijas, 15 nietos, 30 bisnietos y 10 tataranietos.
A los 80 años se inició en el mundo del atletismo, en categoría de mayores, compitió en distancias de 1,500, 800, 400 y 200 metros, cosechó 104 triunfos, obteniendo 31 medallas en competencias internacionales y 72 en nacionales. Asistió a ocho campeonatos mundiales de atletismo máster, corrió año tras año la Maratón de la Ciudad de México y se retiró a los 95 años con un triunfo en los 200 metros planos de San Sebastián, España. En casi todos los campeonatos consiguió medallas como recompensa a sus participaciones que sumaron más de treinta.
También a sus 95 años dejó de repartir periódicos en el puesto que tenía y aunque no consiguió el premio nacional, fue reconocida con el que otorga el Instituto Nacional de las Mujeres.
Cuando la antorcha de la Olimpiada de Atenas hizo su recorrido por México, ella fue la última relevista.
Declaró que ella no conoció las vitaminas o las dietas especiales para corredores, sus vitaminas eran los frijoles y el chile, tampoco necesitó de instalaciones sofisticadas y artículos caros para entrenar, solo necesitó la voluntad y las ganas de hacerlo.
Siempre expresó lo siguiente: “Hagamos deporte todos los días, eso nos va a dar fortaleza tanto física como espiritual”
Sin duda Rosario Iglesias, la famosa “Doña Chayito”, fue fiel a su palabra de mujer.